El corrector es una herramienta esencial en el maquillaje para disimular imperfecciones y realzar la piel, logrando un acabado impecable
Aplicar el corrector de manera adecuada es clave para obtener resultados naturales y favorecedores.
A continuación, te ofrecemos algunos consejos sobre cómo aplicarlo correctamente para obtener un look perfecto.
- Elige el tono adecuado: Asegúrate de elegir un corrector que se ajuste al tono de tu piel. Si tienes ojeras, opta por un corrector de un tono más claro que tu piel para iluminar y disimular las sombras. Para imperfecciones, elige uno del mismo tono que tu piel para camuflarlas sin resaltarlas.
- Prepara tu piel: Antes de aplicar el corrector, asegúrate de limpiar e hidratar bien tu rostro. Una piel bien preparada ayudará a que el corrector se adhiera de manera uniforme y dure más tiempo.
- Aplica en pequeñas cantidades: No exageres con la cantidad. Es preferible aplicarlo en pequeñas cantidades y agregar más si es necesario. Un exceso de producto puede hacer que el maquillaje se vea pastoso y poco natural.
- Para imperfecciones: Para tapar granitos, manchas o rojeces, aplica el corrector directamente sobre la imperfección y luego difumina los bordes con toques suaves con la yema del dedo o una brocha pequeña.
- No olvides el contorno de la nariz: Si deseas corregir el contorno de la nariz, utiliza un corrector más claro en la parte central y un tono más oscuro en los laterales para crear un efecto de afinamiento.
- Sella con polvo translúcido: Para prolongar su duración y evitar que se acumule en líneas de expresión, aplica una pequeña cantidad de polvo translúcido con una brocha suave.
- Menos es más: Recuerda que el objetivo de este producto es corregir, no cubrir por completo. Deja que tu piel respire y muestre su belleza natural.
Con estos consejos, podrás aplicar correctamente el corrector y obtener un acabado impecable que resalte tu belleza natural. ¡Experimenta y diviértete encontrando la técnica que mejor se adapte a ti!