Millones de personas practican yoga en todo el mundo y recientemente los estudios avalan los beneficios que ésta práctica aporta a la salud
La ciencia afirma que realizar alguna actividad física ayuda a reducir la ansiedad y el estrés. Harvard Medical School Massachusetts, afirma que el yoga en su práctica habitual disminuye el estrés, el estado de ansiedad. Muy similar al efecto que propician los ansiolíticos.
La Fundación para la Investigación del Yoga Swami Vivekananda logró demostrar que las personas que practican yoga con regularidad tardan 10 minutos menos en conciliar el sueño. Incluso se aumentan las horas que duermen, en promedio una hora más por noche.
Incluso se tienen indicios de que el yoga aumenta los indicadores del rendimiento laboral. Los practicantes declaran que se sienten con mayor satisfacción y compromiso en sus empleos. Además, en los niños o estudiantes favorece el rendimiento académico y la concentración.
Eso en cuanto a los beneficios en salud mental, mientras en la salud física fortalece a los huesos y músculos. La flexibilidad también se ve favorecida por lo que las lesiones son menos frecuentes y reduce el riesgo de sufrir una lesión.
Al contribuir al equilibrio del sistema nervioso, el yoga también ayuda a reducir los niveles de cortisol y colesterol en sangre. Ayuda también a controlar la tensión arterial por lo que reduce la probabilidad de sufrir un accidente cardiovascular.