No todos los platillos mexicanos son bombas calóricas: algunas de las opciones más populares también son de las más sanas, pero el secreto es no combinarlos con otros alimentos altos en grasas y proteína
Durante septiembre se acostumbra comer todos y cada uno de los platillos que ofrece el amplio abanico de la comida mexicana y lo cierto es que si estamos a dieta o tratamos de mantenernos en forma, lo mejor será medirnos en las porciones y optar por las alternativas más sanas, pero no por ello menos sabrosas, que ofrece la gastronomía local.
Hay varias opciones para los que están guardando la línea, desde los clásicos elotes hasta platillos más elaborados como el pozole o las tostadas, que, sin duda, podrás disfrutar sin culpa durante las fiestas patrias.
Dentro de los platillos mexicanos más socorridos en estas fechas y, aunque no lo parezca, saludables, está el pozole, que por sí solo no contiene un exceso calórico y el secreto para no volverlo una bomba calórica se encuentra en los complementos, es decir, en combinar este manjar con vegetales como la lechuga, el rábano y la cebolla, así como balancearlo con una porción conservadora de proteína (carne) y evitar combinarlo con chicharrón, aguacate y cremas.
Las quesadillas son un platillo mexicano que no puede faltar en la mesa y, de la misma manera que el pozole, conservarlo dentro de un estándar de comida saludable depende de la forma en que lo combinemos, por lo que se recomienda acompañarlo de vegetales, siendo muy socorridos los champiñones, la flor de calabaza o las rajas; además, se recomienda utilizar queso bajo en grasa y cocinar al comal, no frito. Si sigues estos consejos, tu peso saldrá invicto durante las fiestas.
Dentro de los antojitos que no podemos dejar pasar se encuentran los elotes, un alimento bajo en grasa y que contienen vitaminas y minerales que favorecen al metabolismo, además de ser altos en fibra.
Es usual consumirlos, ya sea como esquites o en su presentación más clásica y natural, y esta última es la que se recomienda (cocido o asado), incluso si es posible evitando la sal. La mayonesa y el queso, en el caso de los elotes, así como el aceite y la proteína que se agrega cuando es servido en forma de esquites es mejor evitarlos.
Es aconsejable evitar alimentos fritos, empanizados y capeados, y darles prioridad a las carnes magras por encima de las rojas, evitando así altas ingestas calóricas.
